En su audición de hoy por AM 970 el senador Guillermo Domenech se refirió a la última sesión del Senado de la República, en que se efectuó una declaración condenatoria de la actitud represiva del gobierno de Cuba respecto a la población de ese país que manifestó disconformidad con el régimen en los últimos tiempos. Y dijo:
“El Senador Andrade, por el Partido Comunista, hizo uso de la palabra defendiendo al gobierno cubano, invocando que en definitiva, ese gobierno responde a una Constitución aprobada por el pueblo de Cuba. Nos sorprende esta afirmación porque en realidad el pueblo cubano desde 1959 y quizás desde tiempos más remotos, no ha podido nunca expresarse libérrimamente en una consulta popular que garantizara a todos los cubanos, la más libre expresión de sus ideas”. Y continuó: “Cuba tuvo numerosos regímenes de dudosa calidad democrática, hasta que en 1933 se celebra en Montevideo la Séptima Conferencia Panamericana, y se consagran los principios de no intervención y autodeterminación. De todas maneras Cuba siguió muy sometida a la influencia de los Estados Unidos, hasta que, la Revolución Cubana depuso al dictador Fulgencio Batista. Se instauró este régimen que constituyó en un momento una esperanza de toda la América Hispana, de que Cuba, esa isla ubicada en una situación estratégica en el medio del Caribe, de hermosa geografía y panorámicamente muy bella, merecía incorporarse al conjunto de Naciones Democráticas de la América Hispana. Lamentablemente luego de más de sesenta años de régimen castrista, ha sido sometido a un férreo régimen comunista, donde la libertad de expresión brilla por su ausencia”. Y agregó:
“El problema económico no es el mayor problema de los cubanos, que sí lo tienen, porque en realidad las condiciones de vida en Cuba son extremadamente duras. Pero si somos honestos tenemos que reconocer que en muchas economías capitalistas de la región, la situación económica no es mucho mejor que la de Cuba. Lo verdaderamente dramático en Cuba es la falta absoluta de libertad”. Y enfatizó:
“La falta de libertad es el primer dolor de los cubanos, que desean tener contacto con el mundo exterior y solo pueden tenerlo a través de los pequeñísimos canales que viene permitiendo el gobierno comunista. Eso nos pone sobre aviso de los peligros que puede afrontar un país democrático como el nuestro, cuando existen lamentablemente muchas personas que creen en los cantos de sirenas del igualitarismo comunista que no se trasunta en otra cosa que el entronizamiento de una casta burocrática que dirige al país en su beneficio, como lo hacen los Castro y los Díaz-Canel, y un pueblo sometido no solo a penurias de orden económico, sino también a ese bien, el más preciado que puede disponer el hombre, que es su libertad”. Para finalizar expresó:
“Tutelemos nuestra libertad, cuando además tenemos cabal conciencia de la moral comunista a través del comportamiento de los dirigentes, que no tienen el menor empacho de reconocer que han defraudado tributariamente a la Administración, y simplemente argumentan razones que no tienen ningún peso. Con ese doble discurso se conduce el comunismo, que realmente ha hecho muy infeliz y desgraciado a miles de pueblos”.