Una actividad clave de esta “hoja de ruta” será el lanzamiento a fin de año de tres concursos para equipos locales y socios internacionales: el primero para levantar un edificio de viviendas en altura de madera, un segundo que culmina con la construcción de un barrio de casas de madera y el tercero para un destino social también en el mismo material. Para ello se está trabajando con el Congreso de Intendentes, la empresa privada, gremios profesionales, y académicos de las facultades de arquitectura e ingeniería. Se espera que con ello se mejore la calidad y diligencia en la provisión de la vivienda pública, en directo beneficio de las familias postulantes a este tipo de soluciones. En el evento, apoyado por el Banco Interamericano de Desarrollo, se mostrará la experiencia aprendida de países como Canadá, Finlandia, Japón y Chile, y cómo esta puede adaptarse a la madera nacional y las condiciones propias de nuestra cultura y diversidad de climas y territorios. En la iniciativa se prevé la edificación en altura con este elemento, a través de la Agencia Nacional de