La Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC) es una de las enfermedades no trasmisibles que, aunque se encuentra dentro de las principales causas de muerte a nivel mundial, tiene menor visibilidad y un gran subdiagnóstico. Con el objetivo de visibilizarla y que médicos generales y el personal de salud del primer nivel de atención cuenten con más herramientas para detectarla se presentó, en el marco del Día Mundial de la EPOC, la “Guía de práctica clínica de EPOC”.
En línea de seguir avanzando en la prevención, control y atención de las enfermedades no trasmisibles, esta guía realizada por el Ministerio de Salud Pública (MSP), la Universidad de la República a través de la Cátedra de Neumología y la Sociedad Uruguaya de Neumología (SUNEUMO) con la colaboración de la Sociedad de Tabacología del Uruguay y la Sociedad de Medicina Interna pretende ser una herramienta de consulta orientada a mejorar la educación y prevención de la EPOC, fortaleciendo el control de factores de riesgo modificables, promoviendo el diagnóstico precoz, combatiendo el sub-diagnóstico y analizando los distintos aspectos para mejorar la calidad de vida y el tratamiento óptimo de los pacientes.
En la presentación estuvieron presentes el ministro de Salud Pública, Daniel Salinas; el subsecretario José Luis Satdjian; el director general de la salud, Miguel Asqueta, el director de la Cátedra de Neumología de la Universidad de la República, Dr. Pablo Curbelo y Jimena Núñez, presidenta de SUNEUMO.
La EPOC está directamente relacionada con hábitos de consumo de tabaco, los que han mostrado un aumento significativo en los fumadores durante la pandemia de covid-19 según la encuesta sobre la salud respiratoria en Uruguay que presentó Núñez durante la actividad. El cese de tabaquismo es entonces esencial para la prevención de esta enfermedad, en cualquiera de sus formas.
Los síntomas de la EPOC son muy frecuentemente minimizados o adjudicados a otros factores, pero todos los expositores coincidieron en la importancia del diagnóstico precoz. Por esto es que la guía recomienda que se le aplique una espirometría – un estudio sencillo y no invasivo que permite detectar esta enfermedad – a todo paciente fumador mayor de 40 años que se presente con tos, disnea y flemas. La evolución de la enfermedad sin control puede devenir en insuficiencia respiratoria, oxigenodependencia y hasta trasplante pulmonar en los peores casos.
Es imprescindible tener buenos hábitos de alimentación, ejercicio físico, el no consumo de sustancias que tengan efectos perjudiciales para la salud para prevenir las enfermedades no trasmisibles. El MSP trabaja en esto y una vez más el ministro Salinas reiteró este compromiso: “Vamos a seguir trabajando por todos esos temas de prevención, no tengan ninguna duda».
Fuente: MSP